Todos, creo yo, tratamos de sobresalir, de ser originales, de hacer algo nuevo, de ser únicos, de llamar la atención. Ahora, ¿caminarán por la cornisa?, ¿llegarán al límite? ... ¿te arriesgás?, ¿te entregás? ...
Yo estoy harto de quemarme, no así de prenderme fuego, porque es inevitable, porque vivo en llamas, pero llamas que conllevan lágrimas, aunque no hiervan ni evaporen.
Me han malinterpretado otra vez ... una y otra vez. ¿Seré yo? ... por supuesto, como dije alguna vez ésta no es la época en que debí nacer. Soy un caballero, pero a veces, creo, mi armadura es de acero inoxidable.
No así mi estómago, que vive dándome trabajo, que llama constantemente mi atención. Me dobla, me avisa algo ... y no lo entiendo. Y eso que es mi estómago y no creo que se vaya de ahí. Digo esto porque últimamente vengo alejando a todos, o a muchos ... y no puedo quedarme solo; nadie debe estar solo mas de unas horas ... no se puede.
Mi humor, otro enemigo. Lo creo un aliado, pero corroe, es ácido. Es el que me aleja, es oscuro, contradice mi primera sensación, al despertar, cada mañana ... salvo los días radiohead, que son bellos.
¿A dónde van todos tan rápido?, ¿a dónde vamos? ... ¿dónde están los salmones?, ¿donde los remansos? ....
y entonces no tenés tiempo para recordar tu efimera existencia, porque lo ausente y lo concreto invade las mentes, y la soledad (algo que sólo uno mismo puede conocer) es sólo una sensación de despojo emocional; y patético te vuelves, en tu efímera vida que el tiempo ve pasar como una mosca sin rumbo, la dependencia de otra alma, que, a fin de cuentas, sólo pretende algo de vos. He aquí la clarisima demostración de que las compañías son solos contratos necesarios para nuestra, aunque efimerísima, existencia.
ResponderEliminar-Edu, muy bueno. no le doy bola a mi blog, no le doy bola. porque nadie entra. pero si prometes entrar, entonces le voy a dar bola.
salud!
Has descripto nada más ni nada menos que tu realidad, ésa que con tus pensamientos has creado. Nadie tiene la culpa de lo que nos pasa. Es muy cómodo que los responsables estén en el afuera. Y sin embargo en el último recodo de la vida,aprendés que el único hacedor y responsable sos vos mismo. Tu enfermedad y tu cura están dentro tuyo como ocurre con todos los casi humanos que somos. Te recomiendo que te des una vuelta por: Los años no vienen solos. . .(http://misabiduriainterior.blogspot.com)y vayas a la etiqueta: Mi pensamiento. Leé las últimas o las que te gusten pero de más antigua a más reciente.Muy buena tu descripción y hermosa tu forma de escribir, pero este avance me dolió.Un abrazo, compañero de la Red
ResponderEliminarLos comentarios se contestan. Date un mínimo tiempo para expresarte cada día. ¡Vamos compi, ya estás comprometido con la telaraña!Un abrazo
ResponderEliminarla realidad de mis pensamientos, exactamente, ya que la realidad no es para todos la misma; por mas que seamos vecinos o compartamos cama. No estoy enfermo, y si lo estoy lo prefiero a ser un sano más, con realidades similares y sus miedos a no ser igual. Tampoco entiendo que es lo que le dolió, pero no debo ni tengo que entenderlo, lo mejor de todo es haberle causado una sensación tan intensa como esa, ya que ese es el objetivo de intentar hacer algo artístico ... que corte .. no solo son buenas sensaciones como la alegría y el placer se puede encontrar donde otros nada ven. No me corte las alas. Gracias por los comentarios. Me encanta pelear. Lo hago , hice y voy a seguir haciendo siempre.
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